Hoy quiero hablarte sobre un dicho bastante conocido:
“El que no arriesga no gana”.
A partir de esta frase, leí a alguien decir que “el que no arriesga no tiene nada que perder” y me dejó pensando un largo rato. El que no arriesga ¿no pierde nuevas oportunidades y posibilidades de ser/hacer lo que se quiere? ?
Y el que gana, ¿qué gana? ?
? Podemos hablar de alguien que arriesgó sin conseguir éxito pero ganando experiencia, nuevos aprendizajes, nuevas maneras de encarar los distintos obstáculos que se presentan o nuevas oportunidades disfrazadas de adversidad. ?
Tomar carrera y tirarte sin saber si el paracaídas se va a abrir o no en el lugar que querés, ya de por sí implica una ganancia:
? Ganás confianza en vos y en tu proyecto. Ganás nuevas posibilidades de seguir aprendiendo y nutriéndote para que, el momento en el que llegues a la meta, lo hagas con conocimientos y preparado para todo lo que viene con ella.
Y no arriesgarse, un poco es perder ? (ojo, desde mi punto de vista): No te das el lugar a crear nuevas oportunidades, no salís a buscar eso que tanto deseas, no das el salto para cumplir los desafíos que te llevan a tu presente o futuro ideal.
Sí, esto te debe generar la misma duda que a mí: Entonces ¿deberíamos arriesgarnos más y temer menos?
Puede ser ?. Pero mi experiencia me dice que no sin acordarnos dónde estamos parados y centrarnos en lo que verdaderamente queremos sin lastimar a nadie.
No vas a ir corriendo mirando solo hacia adelante y chocándote con las personas que se cruzan en el medio, sin chequear ambos lados ni valorar lo que quedó atrás y colaboró con lo que sos hoy.
¡No seas atropellado! ?
Sí, está perfecto que te priorices, como siempre digo, uno necesita darse la importancia que se merece. Pero es necesario que tomes consciencia de qué y quienes te rodean para relacionarte desde una posición de empatía y respeto.
No solo porque quizás en un futuro estas personas sean quienes tengan la posibilidad de ayudarte a abrir el paracaídas ? en plena caída y viceversa, sino también por el simple hecho de que son personas como nosotros y merecen ser tratados de la mejor manera. Recordá siempre que somos seres emocionales, aprovechemos eso para generar vínculos más profundos y acompañarnos a la línea de meta. ?
Entonces, se podría decir que, por lo menos por ahora, he llegado a una conclusión y me encantaría compartirla:
? El que arriesga, va a ganar aún “perdiendo”. Lo digo entre comillas porque creo que en realidad no existe pérdida si hay aprendizaje. De toda situación se puede a-p-r-e-n-d-e-r.
? El que no arriesga y se queda en el mismo lugar en el que siempre estuvo, ya sea por miedo, falta de motivación o comodidad, va a “perder” la posibilidad de seguir creciendo tanto profesional como personalmente.
Este es solo mi punto de vista, es por esto que me gustaría leerte a vos y que podamos reflexionar juntos:
? ¿Qué crees que es lo que se “gana” cuando tomamos riesgos?
? ¿Qué “pérdida” se evita al no tomar riesgos?