¿Te acordás cuando de chiquito jugabas a ser astronauta, médico, paleontólogo o profesor?
✨ Cuando no había obligaciones, ni influencias externas.
✨ Antes de que alguien te dijera lo que debías ser.
Te invito a reflexionar: ?
¿Cuándo fue que comenzaste a moldear tus acciones en base a lo que te decían los demás? ¿Sos quien realmente querías ser?
A lo largo de nuestra vida nos vemos rodeados de personas, contextos y aprendizajes que van forjando nuestra personalidad, nuestras costumbres y nuestros valores.
No somos los mismos que éramos hace unos años, vivimos en constante cambio.
Pero: ¿Somos quienes queremos? ¿O somos resultado de lo que los demás nos exigieron? ?
?♂️?♀️ Está bueno que nos tomemos un tiempo para conectarnos con nosotros mismos; hacer una pausa, reflexionar y reiniciar nuestra cabeza. Tomar conciencia de dónde estamos, quiénes somos y dónde queremos llegar.
Creo que es muy importante no olvidar lo que alguna vez nos produjo placer, felicidad, lo que alguna vez nos divirtió. Cuando hacés tus actividades, ¿Sentís lo que de chiquito, cuando jugabas a ser alguien distinto cada tarde?
Preguntarnos esas cosas nos ayudará a seguir el camino que estamos emprendiendo y tomar nuevas decisiones abocadas a lo que genuinamente queremos. ?
Tal y como les comunico siempre: escuchémonos y prestemos atención a nuestro sentir. Reconocer qué cosas son impuestas por los demás, y cuáles son las que verdaderamente queremos conservar.
¿No estás contento con tu vida actual? ¿No sentís una conexión entre ese niño jugando de chico y lo que hacés ahora? No te frustres. Creé en vos mismo, aferrate a lo que te haga sentir bien y producí el cambio que necesitas en tu vida.
¡Vos podés! ?
Las cosas en la vida no llegan solas, ¡Sé el responsable de un cambio significativo en tu vida! (Sí, ya sé, es un proceso largo, pero te prometo que vale la pena).
Y acordate que nunca estás solo. La gente que te rodea puede ayudarte en este camino. Es clave poder contar con personas que se interesen genuinamente en vos (y devolverles eso también!). No está mal pedir ayuda cuando lo necesitamos, a veces no se puede hacer todo solo.
Entonces, te invito a reflexionar y tomar conciencia de quiénes son y todos los cambios y aprendizajes que te trajeron a donde estás hoy.
? A que si no estás contento con tu vida digas ¡basta! y animarte al cambio.
? A devolverle a tu adulto de hoy un poco de ese niño que, antes de que el mundo le dijera qué hacer, qué decir, cómo desenvolverse, jugaba feliz a ser quien quisiera.
Ismael.